Algunos estaríais echando de menos la crónica del Concierto del domingo, pero es que ayer tuve un día muy ajetreado, de esos que no paras un momento y encima con "esa calóóó..."
Creo que, si antes lo pasaba muy mal en verano, ahora lo voy a pasar peor, porque me llevé todo el sol que me tocaba para todo el año, y eso que me fui moviendo de sitio en cada partitura, pero ¡nada! al minuto ya lo volvía a tener encima de mí. En vez de ver a Paco, veía un resplandor que me hacía cerrar los ojos si intentaba verle, por lo que tuve que fiarme de mi propia intuición. Todos lo pasamos muy mal por el calor, pero creo que, excepto a Narayana en algún momento, a la única que le paso esto fue a mi (y me alegro por vosotros, que lo de el mal, compartido, no es menos mal).
A pesar del calor, el concierto, si nos fiamos de los comentarios que llevo recogiendo, tanto allí al terminar, como ayer por la calle, gustó muchísimo. El repertorio fue aplaudidísimo, en eso coincide todo el mundo y, aunque nosotros sabemos que una pieza no nos salió como para tirar cohetes, como el público no conocía la obra y es muy cambiante, no notaron los fallos. (Como este blog lo lee mucha gente, no voy a poner el nombre, ya sabemos todos cual fue, para no dar pistas, que si les pareció muy bien, no seré yo la que diga lo contrario). Pero, aparte de eso, no se si sería por la acústica de la plaza, o por los muchos ensayos, pero quedó genial. La pieza mas celebrada por todos los que han hablado conmigo fue el "Bellas Artes" (y la "Estampa" ¡claro!).
Lo de los pequeños levantándose para tocar y que David tocara sólo en una de sus intervenciones, también gustó mucho por lo que supone de potenciación de los mas jóvenes.
Y ahora, Aibar. Siento tener que deciros que me han comunicado que tampoco ponen sábana bajera ni funda de almohada, así que nos tenemos que llevar el juego de cama completo. Y toallas, claro, que eso se me había olvidado (aunque ya os lo imaginaríais ¿no?). En el ensayo de hoy os haré unas preguntas para el reparto de habitaciones (la única que está clara, y completa, es la mas grande).
Bueno, os veo en el ensayo de esta tarde.
Aunque ya no están con nosotros (en la Banda, claro), quiero dar la enhorabuena a Román Cubelos y a Nicolas Mellon que han entrado en los Conservatorios Superiores de Pamplona y San Sebastian, respectivamente, en la modalidad de Contrabajo y de Bajo eléctrico de Jazz. Ayer les escuché en la Plaza del Mercado y me parecen muy buenos. En esa actuación del Aula de Música Moderna de la Escuela de Barbastro (la que cerraba definitivamente el curso) los últimos fueron un "Combo" en el que participaron Guillermo y Sara con sus saxofones, ya que acudieron a la petición de su antiguo profesor Fernando LLeyda. En las actuaciones de percusión también intervinieron nuestros dos Pablos (Grasa y Rodríguez).
Había olvidado poner, que el domingo nos encontramos sin tubas, por lo que Paco tuvo que localizar "in extremis" a Albert, buen conocido nuestro, ya que ha colaborado con nosotros en varias ocasiones, tuba de la Banda de Fraga, que llegó a tiempo para tocar, aunque retrasamos un poco el inicio del concierto y cambiamos el orden, empezando por Blossom (en el que no era tan necesario) en lugar del Bellas Artes que era por la que íbamos a empezar. Como, hasta última hora, no se sabía si podría venir, el director se trajo el saxofón barítono de Fraga y lo tocó, en varias partituras, Guillermo. Creo que estaba contento, porque lleva un tiempo queriendo tocar ese saxo. Creo que la Banda tendría que plantearse adquirir uno, como pasa con tubas, bombardinos y otros instrumentos graves, porque es muy importante en una banda (si os fijáis, la mayoría tienen alguno). Así que ¡gracias, Albert, por acudir a nuestra llamada, hecha con tan poca antelación! (Y enhorabuena, porque ha terminado el Grado Profesional en Lérida).
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