UN APLAUSO PARA EL CONDUCTOR
Tras el concierto de las Fiestas de San Ramón del año 2024, una vez recogido rápidamente todo el material dentro de la furgoneta para llevarlo al local de ensayos ya que tras el concierto de la banda estaba programado en la misma iglesia de los Padres Escolapios el tradicional encuentro de corales que organiza anualmente la Coral Barbitanya, se produjo un buen barullo ya que coincidió que había mucha gente que acudía a las actuaciones musicales, que la calle de acceso a la plaza del ayuntamiento estaba cortada por obras; entonces el conductor de la furgoneta Alfredo Ordás tuvo que hacer innumerables maniobras para sacarla de su aparcamiento y varias personas improvisadas ayudantes intentaron dirigir las maniobras hasta conseguir sacarla del atolladero lo que provocó al finalizar las mismas uno de los aplausos más sonoros de la tarde por parte de todos los presentes.